jueves, 28 de octubre de 2010

Mujer de 30 años

Me dijo: «hazme un hijo». Yo le dije: «No sé»; «ja, que no sabes qué», me volvió a decir... «Hijos, no sé de hijos», respondí; «¿No has sido tú uno?», me insistió. «Lo siento, no sé tampoco de padres». «Hazme un hijo —repitió—, yo te enseñaré. Soy la mayor de 8 hermanos, he tenido hijos desde que tenía seis años y mi mamá se iba a trabajar». Me quedé callado. Ella se levanta de la cama. Creí ver que le brotaba una lágrima cuando se miró al espejo. Pero no, ella nunca lloraba. Al fin sale del cuarto, sabiendo que ya no volveríamos a encontrarnos más.

lunes, 18 de octubre de 2010

El café

Para muchas personas y culturas el café significa un disfrute único: desde tomar a solas un café puro, hasta los momentos en que se sirve cuando uno está en grata compañía o en una cargada reunión de negocios.
Todo empezó, dice una leyenda, cuando un pastor etíope (en la provincia de Kafa) descubrió que sus cabras tenían mayor vitalidad cuando consumían unos frutos rojos que colgaban de un arbusto. Llevó estas semillas a un abad, quien empezó por hervir las semillas y probar en sí mismo sus efectos. Como la bebida resultante era de muy mal sabor tiró los restos a una hoguera, donde quedaron algunos granos, que mientras se quemaban empezaron a despedir un agradable aroma. No pasó mucho tiempo para que empezaran a tostar el café y descubrir su sabor e influjo en el ánimo. Maravilloso, inmortal y sublime instante en que el primer humano tomó el primer sorbo de café… desde aquel infinito segundo, se determinó el destino universal de esta bebida.
Se documenta que llegó en 1600 a Europa, y en 1689 a América, donde fue recibido y adoptado con entusiasmo. En 1727, se estableció la primera plantación en Brasil. En 1785, el café hizo su aparición en Colombia, donde su explotación ha llegado a constituir una de sus más importantes actividades económicas. En Costa Rica, España, Portugal y Río de la Plata es frecuente el consumo de café torrado o torrefacto (tostado con azúcar).
Un café de alta calidad exige que desde la siembra hasta su consumo, se sigan exigentes controles de calidad: en la recolección, el secado, la selección, el pilado, el tostado, incluso en la molienda. Un buen café, considerado como tal en el mundo se denomina café gourmet y significa que ha sido producido, no solo con altos estándares en todos sus pasos sino que lleva implícita una garantía en su sabor.
Existen casi tantas formas de preparar esta bebida como consumidores, y a ellos va dedicado este libro… para preparar este maravilloso regalo de Dios.

Horas para tomar café

En la mañana para empezar el día renovados y con energía mental.
En la tarde para analizar los logros que se van obteniendo.
En la noche para refrescar los pensamientos y proyectar un mañana mejor…
Y, además, a cualquier hora que el espíritu, la situación o la sensualidad lo exija.

viernes, 15 de octubre de 2010

¿Qué pasó con tu vieja radio Miraflores?

Hoy escuchando radio,pasé por el 96.1 de Frecuencia Modulada y encontré una programación tipo Radio Felicidad, y no pasó 20 segundos y escuché una cuña que decía «Exitosa».

Pues eso, ¿qué pasó con radio Miraflores? Pues me voy enterando que la radio murió.

Qué pena. A todo esto ¿qué será del «Cachorro»?

Paradoja:

En: http://www.peru.com/cyberperiodista/ESPECTACULOS/SGI/PORTADA/2010/10/15/detalle9448.aspx

Sale lo siguiente:

«Programa 'Salsa y Timba' recibe premio internacional por su 13 aniversario
Por: richard morris

El conductor del programa radial “Salsa y timba” emitido por Radio Miraflores y conducido por Richard Morris, señaló que su programa respeta todos los gustos musicales de la gente y que da la bienvenida a todos los fanáticos del son, la salsa, la cumbia y la timba en general.»


La noticia es de hoy. ¿Existe el programa y ya no la radio?, ¿Cómo es que el redactor de la noticia es el mismo que dirige el programa premiado? No entiendoooo.

Actualización: he visitado la página web de radio Miraflores y sigue activa. Hay un enlace para escuchar la radio en vivo por Internet. He hecho clic y se escucha una programación basada en boleros. Dice que están en los 1250 de Amplitud Modulada. ¿ahí estará Salsa y Timba?

martes, 12 de octubre de 2010

Simple gastronomía, gastronomía simple, arte culinario. COMER rico

1.

En simple gastronomía, antepuesto el adjetivo, la frase nominal resultante se utiliza para minimizar a su núcleo. Como cuando un adolescente le dice a su padre abogado o ingeniero que quiere estudiar «para ser chef (¿gastrónomo?)»:

—Eso no es una ciencia —diría, colérico, el papá—. ¡Cómo vas a comparar la administración de empresas con la simple gastronomía!

Pues yo no podría ser tan tajante cuando existe la gastronomía molecular y, entre otros, Ferran Adrià, considerado por muchos como el mejor chef del mundo (¿por qué no es el mejor «gastrónomo»?).

Así que adolescentes del mundo si su sueño es estudiar gastronomía apréndanse bien el argumento de lo molecular y puede ser que su papa, médico o arquitecto, se quede sin respuestas inmediatas y aprovechan para sacarle el dinero e inscribirse en algún curso de esos.

Primera conclusión: de simple la gastronomía, nada.

2.

Si vamos al DRAE y vemos el significado de gastronomía, encontramos:

gastronomía.
(Del gr. γαστρονομία).
1. f. Arte de preparar una buena comida.
2. f. Afición a comer regaladamente.

Podríamos llegar a la conclusión de que la primera definición académica queda un poco corta o insuficiente para los niveles de perfeccionamiento y de complicadas preparaciones culinarias existentes en el mundo. Esto de preparar una «buena» comida es tan difuso, como que alguien pueda considerar «bueno» comer carne humana y estrictamente hablando nadie le podría refutar desde cualquier «gastronomía», que publique un recetario sobre cómo preparar, digamos, muslos de humana tierna (ya sé que esto es una cuestión ética, pero de ética no estoy hablando…).

En la segunda opción luego de disgregar el significado de regaladamente, nos quedamos con algunas acepciones:

regaladamente.
1. adv. m. Con regalo y delicadeza.

regalo.
(De regalar1).

2. m. Gusto o complacencia que se recibe.
3. m. Comida o bebida delicada y exquisita.

delicadeza.
(De delicadez).
1. f. finura.
2. f. Atención y exquisito miramiento con las personas o las cosas, en las obras o en las palabras.
4. f. escrupulosidad.

finura.
1. f. Cualidad de fino.

fino, na.
(De fin, término).
1. adj. Delicado y de buena calidad en su especie.
9. adj. Que hace las cosas con primor y oportunidad.

escrupulosidad.
(Del lat. scrupolosĭtas, -ātis).
1. f. Exactitud en el examen y averiguación de las cosas y en el estricto cumplimiento de lo que alguien emprende o toma a su cargo.

Así que según el ente académico la afición a comer regaladamente es, forzando algunas coherencias, comer con finura, escrupulosidad, haciendo las cosas con primor y oportunidad, además de usar alimentos superiores en calidad. Mejor lo afirma la Wikipedia («¡Cómo, otra vez! Esto no tiene ninguna rigurosidad», diría Charlie Ley, destacado antropólogo y amigo) y se acerque más a lo que la gente y los cultores mismos asumen de la gastronomía:

«La Gastronomía es el estudio de la relación del hombre, entre su alimentación y su medio ambiente (entorno).
» Gastrónomo es la persona que se ocupa de esta ciencia. A menudo se piensa erróneamente que el término gastronomía únicamente tiene relación con el arte culinario y la cubertería en torno a una mesa. Sin embargo esta es una pequeña parte del campo de estudio de dicha disciplina: no siempre se puede afirmar que un cocinero es un gastrónomo. La gastronomía estudia varios componentes culturales tomando como eje central la comida».

Ajá, tenemos aquí una distinción entre gastronomía y arte culinario, fuera de que ya nos alejamos del DRAE (como siempre nos sucede cuando ahondamos en cualquier criterio). Habría que ver qué aspectos culturales son los que precisamente ve un gastrónomo y si todo gastrónomo considerado como tal sabe lo que según esta definición debe saber. Para más señas, continuemos con la Wikipedia para enterarnos sobre los aspectos que debe dominar el gastrónomo («Esto es inaudito, Ferny, no puedes aspirar a nada, basándote en la Wikipedia»):

«Es por todo aquello, que existen estudios de gastronomía, los cuales se ven reflejados en diversa literatura. Y es que en la gastronomía, uno puede ver una gran gama de elementos o materias, las cuales confluyen dentro del término. Podemos señalar a la historia, la sociología, la antropología, diversas artes, el estudio de los alimentos por parte de la agronomía, etc. Todos elementos o materias presentes en la cultura arraigada de una nación. La cual, con el paso de los siglos, va dando forma a la gastronomía típica de aquel país o región.»

Segundo ajá, así que no todo cocinero o chef es un gastrónomo. Mmmm. Sobre esta base de tener que saber desde historia, geografía, antropología y demás, creo gastrónomos habría muy poquitos…

Pero bueno, sigamos en lo mío. Ya que la gastronomía es alambicada, bueno, digamos profunda, desde su concepción, sería algo paradójico postular que exista una gastronomía simple. Quizás mencionar la gastronomía minimalista cuando dice:

«Lo llaman gastronomía minimalista.
El chef Jesús Rojas explica que esta es una tendencia que aplica las figuras geométricas (cuadrados, rectángulos, círculos) a la comida. Usa lo simple, también juega con los colores negro y blanco. "La arquitectura del menú llega a la cocina, pero no aleja la sofisticación del plato", señala Rojas. De esta manera, la comida y la arquitectura se complementan en la gastronomía.
La corriente viene de la novelle cuisine, de Francia, con el chef Adrián Ferrán [¿quién es este?, ¿no será un afrancesado Ferrán Adrià? ¡Ay!, estos de EFE, ya no son los que eran] a la cabeza. Pregona la experimentación de los sabores y el juego continuo de texturas. Pero —dice Rojas— sin perder la armonía del plato, juegas con lo salado, lo cítrico, los caramelos, las alturas y las líneas.»

Pero para lo poco o mínimo no entra en consideración la preparación compleja que pueda estar detrás. Así que por aquí simple tampoco.

3

Entonces, por ahora, abandonaremos conceptualmente la ocurrencia de una gastronomía que pueda ser simple, y para el propósito de lo que escribo (aunque no lo crean si hay uno) quizás no me queda más que ir por el lado del «arte culinario» si quiero seguir a mi despreocupada amiga Wiki y decir, por fin:

Que cocer veinte papas andinas variadas, y servirlas así sea sobre el mantel y COMER una tras otra las diferentes variedades, solas o acompañadas con una salsa de ají amarillo, o con salsa de rocoto, o acompañadas solo de queso serrano, o acompañadas con huevo o con huacatay, o, por último, acompañadas con lo que tu imaginación quiera (pero sin importarte ni un poquito la historia de desarrollo genético ancestral papal, como tampoco el uso y difusión que esta haya tenido culturalmente en las sociedades prehispánicas) desde mi humilde posición de humano comedor no gastrónomo, ni gourmet, es un PLACER digno de los dioses, si estos alguna vez necesitaron de calorías.

(Tanta vaina has escrito para llegar a decir que comer algo tan SIMPLE como papas andinas sancochadas es un LUJO y que por qué no ves a muchos gastrónomos o gourmets probando la inmensa pero inmensa variedad de papas ayacuchanas, andahuaylinas, huancavelicanas, tarmeñas y más; y, además, por qué en los restaurantes de esos caros no se ofrece, por ejemplo, como entremés, las tan mentadas papas).

Así es, y decir lo mismo de otros tantos productos y variedades nacidos de una única evolución terrenal.

Algo cercano a lo que propugna Dan Barber:
Véase: Página de Dan Barber en Blue Hill Farm
También: Dan Barber, el mejor chef de USA

Pero, vamos si aquicito no más en la franja costera en que vivo nadie ha podido hacer crecer una buena papa amarilla ni un choclo que se compare con el sabor del terruño andino, menos podrá hacerse con las papas en Norteamérica. Quizás en un par de historias universales más pueda la papa norteamericana tener el sabor de una papita con queso serranos.

Y la pregunta también queda suelta: si Dan Barder privilegia las formas de siembra y de cosecha, y por eso lo premian, ¿eso es gastronomía?, ¿arte culinario?, ¿el mejor chef por ser el mejor criador u horticultor?

Bueno, por lo visto, sospecho que hay una vieja gastronomía pesada y petulante llena de mañas y otra emergente, propia de estos días posmodernos y neoneardentalensis que no sabe dónde está sus límites.

Igual, sea así o asá, no me afecta en nada, pero eso sí cuando vayan a cualquier parte de la sierra sudamericana busquen papitas locales sancochadas...

Como anecdotario también ver:
Dan Barber y la tontería del ecochef



Nota del autor: Me reservo el derecho de rehacer en parte o totalmente este artículo sobre la base de nuevas lecturas o de alguna bibliografía seria al respecto (te quiero mucho Wiki, pero debes reconocer que tienes más contradicciones que la Biblia). Acepto donaciones y ¡gracias, virtualidad! que me permites estos excesos.